Son dos y cuarenta, tengo sueño pero no puedo dormir, me quede pensando en una charla que tuve con una amiga. Nos preguntamos por que nadie participa o se engancha con estas cosas, yo creo que es por que no les interesa o no se animan a que les interese. Por que animarse significaría un poco jugarse, y para que arriesgarse, ¿no?.
Me quede pensando en eso, y no quiero ser una mas. Así que acá estoy con mi granito de arena, que no aporta mucho, pero apoya y prefiero eso antes que nada.
Me quede pensando en por que elijo el IUNA bajo todas estas condiciones, y la verdad no se si tengo una respuesta concisa. Lo que puedo es contarles algunas cosas que viví. Cuando entré, (allá por el 2004) algo que me sorprendió muchísimo fue ver que para las fechas de los finales muchos de mis compañeros colgaban sus trabajos y mientras les corregían ellos dormían sobre las mesas del bar. Y pensé entre mi, están re locos ni en pedo hago eso. Después veía como hacían horas de cola para comprar un apunte ya que en “horas pico” ir a la fotocopiadora es una tortura. Con las cursadas me fui haciendo parte de todo eso, porque dormir poco para una entrega no quiere decir que no hiciste las cosas a tiempo (que puede ser una de las opciones), también es que hay detalles que hasta último momento estas arreglando, y no dormís; o no sabes cómo corno grabar ese video que pasaste editando los últimos 15 días porque en tu vida usaste esos programas. Se te vuelca la tinta china y tenés que ver como corno arreglar el manchón q te dejo. Hasta que me encontré haciendo todas estas cosas. Haciendo cuatro horas de cola para inscribirte y poder anotarte en esa materia que tenia pocos cupos por que solo hay un aula en la que la podes cursar con un solo horario en la semana, y para colmo es el aula mas chica!!!! Pero no te importa por q te dijeron que estaba buenísima!. En el IUNA encontré profesores y compañeros que hicieron que valga la pena. Gente, esto funciona a pulmón, peleando todos los días por el proyector, peleándote por aparecer inscripto en los listados, pero seguimos acá por que (al menos yo), creo que vale la pena.
Una anécdota, encontrarme con un profesor que me felicito y agradeció por estar cursando. Me dijo que valía la pena ir a dar clase por que sus alumnos asistían aunque no haya un modelo vivo en pintura, aunque la cursada sea de 5 horas, aunque no sepamos si nos iban a poder calificar o no. Porque, sí gente!, les cuento que cursamos un cuatrimestre sin saber si estábamos o no inscriptos. Pero no importaba la nota, importaba ir y pintar. Eso lo logran buenos profesores, …hay para todos los gustos eso seguro. Creo que los que seguimos acá tenemos algo muy copado en común, el sueño de ser mejores artistas, y no hay que desaprovecharlo. Desde que entré la mayoría de mis conocidos fueron abandonando, no está bueno que llegues al punto en el que tu propia facultad te decepciona y hace que quieras irte. A mí me decepciono varias veces pero sigo acá, porque después de tanto esfuerzo creo que me debo a mi misma el terminar lo que empecé, y creo que desde que entre crecí mucho y pude ver, hacer, y participar de producciones muy interesantes. Creo que hay profesores y compañeros que hacen que valga la pena. Sin los alumnos que vayan a las clases no existe ninguna facultad, así que voto seguir tratando de conseguir lo mejor.
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Por Adrián Pérez
Dos estudiantes después de ser agredidos con gas pimienta.
